¿Qué Hacer Durante una Crisis? Una Guía Paso a Paso
Imaginemos esto: estás en la calle, en el trabajo, o incluso en casa, y de repente ves a alguien que sufre una convulsión. El pánico puede apoderarse de ti, ¿verdad? Es normal sentirte así ante una situación inesperada e incluso aterradora como esta. Pero la clave está en la calma y en la acción rápida, pero informada. No te preocupes, este artículo te guiará paso a paso para que sepas exactamente qué hacer. Verás que, con un poco de conocimiento, puedes ser la diferencia entre una experiencia traumática y una situación manejada con eficiencia y seguridad.
Reconociendo una Crisis Epiléptica
Antes de saltar a la acción, es fundamental saber identificar una crisis epiléptica. No todas las convulsiones son iguales, y algunas pueden confundirse con otros problemas médicos. Una crisis epiléptica, o convulsión, se caracteriza generalmente por movimientos musculares involuntarios, a veces violentos, pérdida de conciencia y rigidez corporal. Puede haber espasmos, sacudidas, y la persona puede emitir sonidos inusuales o incluso perder el control de esfínteres. Pero recuerda, cada crisis es diferente, y su intensidad puede variar enormemente. Si ves a alguien con movimientos inusuales, rigidez, pérdida de conocimiento y sospechas que puede ser una crisis epiléptica, es mejor actuar con precaución.
Diferenciando una Crisis de Otros Problemas
Es importante no confundir una crisis epiléptica con otros eventos, como un desmayo simple o un ataque de pánico. Un desmayo suele involucrar una pérdida de conocimiento breve, sin movimientos convulsivos. Un ataque de pánico, por otro lado, puede manifestarse con taquicardia, dificultad para respirar y ansiedad intensa, pero no con movimientos musculares incontrolables. Si estás inseguro, recuerda que es mejor actuar como si fuera una crisis epiléptica, la intervención oportuna no dañará, pero la demora sí puede hacerlo.
Actuando Durante la Crisis
Ahora que sabemos reconocer una crisis, ¿qué hacemos? Actuar con rapidez y serenidad es fundamental. Piensa en ello como si estuvieras manejando un incendio: el pánico solo empeorará las cosas. Aquí te damos algunos pasos cruciales:
Asegurar la Seguridad de la Persona
Lo primero es proteger a la persona de posibles lesiones. Si está cerca de objetos que puedan causarle daño (escaleras, mesas con objetos afilados, etc.), intenta alejarlos suavemente. No intentes sujetar a la persona con fuerza, ya que podrías lastimarla o incluso provocar una lesión mayor. Lo ideal es simplemente despejar el área circundante.
Proteger su Cabeza
Durante una crisis, la persona puede golpear su cabeza contra el suelo. Si es posible, coloca algo suave debajo de su cabeza, como una chaqueta o una almohada, para amortiguar el impacto. Recuerda que la prioridad es minimizar el riesgo de lesiones adicionales.
Cronometrar la Crisis
Mientras la persona está teniendo la crisis, cronometra su duración. Esta información será muy útil para los profesionales médicos. Recuerda que, aunque parezca una eternidad, las crisis suelen durar de uno a tres minutos. Si la crisis dura más de cinco minutos, es una emergencia médica que requiere atención inmediata.
No Intentar Meterle Nada en la Boca
Un mito muy común es que hay que meterle algo en la boca a la persona para evitar que se trague la lengua. Esto es completamente falso y potencialmente peligroso. La persona no se tragará la lengua durante una crisis. Intentar hacerlo podría provocar lesiones en la boca o la mandíbula.
Mantener la Calma y Tranquilizar a los Espectadores
Tu calma puede ayudar a tranquilizar a la persona que está teniendo la crisis y a los demás testigos. Un ambiente tranquilo es fundamental para que la persona se recupere de manera más eficiente. Recuerda que tu presencia y tu apoyo son importantes.
Después de la Crisis
Una vez que la crisis ha terminado, la persona puede estar desorientada, confundida, cansada y con dolor muscular. Es importante mantenerla en posición lateral de seguridad (posición de recuperación) para evitar que se ahogue con su propia saliva o vómito. Si la persona está consciente, habla con ella con calma y tranquilidad, asegúrate de que se sienta segura y cómoda. Ofrécele un espacio tranquilo para que pueda recuperarse.
Llamar a los Servicios Médicos
Llama a los servicios de emergencia si la crisis dura más de cinco minutos, si es la primera vez que la persona sufre una crisis, si la persona se lesiona durante la crisis, si la persona no respira normalmente después de la crisis, o si tienes alguna duda. Es mejor prevenir que lamentar.
Acompañamiento y Apoyo
Una vez que la persona ha recuperado la conciencia, ofrécele apoyo y compañía. Puede sentirse avergonzada, confusa o asustada. Recuerda que ser comprensivo y paciente es fundamental. No la presiones para que te cuente lo que ha pasado, simplemente ofrécele tu apoyo y compañía. Si la persona tiene un familiar o amigo cercano, intenta contactar con ellos para que puedan brindarle su apoyo.
Prevención y Apoyo a Largo Plazo
Si la persona sufre de epilepsia, es importante conocer su plan de manejo de la enfermedad. Muchas personas con epilepsia llevan consigo una pulsera o un brazalete de identificación médica que indica su condición y proporciona información de contacto en caso de emergencia. Respetar su privacidad y seguir sus instrucciones es fundamental. Si la persona no tiene un plan de manejo, la ayuda de un profesional médico será crucial para el diagnóstico y el tratamiento.
¿Puedo dar medicamentos a la persona durante una crisis? No, a menos que la persona tenga una prescripción médica específica para administrarse un medicamento en caso de una crisis. Interrumpir una crisis con medicamentos sin la debida autorización puede ser contraproducente.
¿Qué debo hacer si la persona no respira después de la crisis? Llama inmediatamente a los servicios de emergencia. Comienza a realizar RCP si estás capacitado para hacerlo.
¿Es contagiosa la epilepsia? No, la epilepsia no es contagiosa.
¿Qué debo hacer si la persona se muerde la lengua? No intentes sacar nada de su boca. La lengua no suele sufrir lesiones graves durante una crisis. Una vez que la crisis haya terminado, puedes ofrecerle un poco de hielo para aliviar el dolor.
¿Cómo puedo ayudar a una persona con epilepsia en su vida diaria? La mejor forma de ayudar es informándote sobre la epilepsia y siendo comprensivo y paciente. Recuerda que cada persona es diferente, y su experiencia con la epilepsia también lo será. Ofrece tu apoyo y comprensión, y respeta su privacidad.